Importar de China tienes sus pros y sus contras. Para hacerlo con éxito te ofreces las siguientes claves para tomar todas la precauciones posibles.

1. Conoce bien a tu proveedor. Verifica la identidad de tu proveedor antes de empezar a trabajar  con él. Debemos contactar con el proveedor y solicitar  información de la empresa, registro, documento que acredite cuando se constituyó, número de empleados tiene, capacidad de producción, otros clientes, certificados, etc.  y por último vista la fábrica. Si no sabes cómo hacerlo, ponte en las manos de un profesional en la búsqueda de proveedores y auditorias de fábrica.

2. No compres un producto sin ver antes una muestra o la fabrica.  No te fijes solo el precio que te da el proveedor, sino en la calidad del producto y del servicio que te da tu proveedor. Una muestra de producto del proveedor  es la única referencia de calidad que obtendremos al importar de China. Habitualmente suelen tener un coste bajo o incluso gratis, teniendo solo que pagar el transporte.

3. Controla la calidad de la producción. Debemos garantizar que el proveedor cumple con los requisitos establecidos en la negociación.  El objetivo es detectar fallos durante la producción y evitar retrasos en los plazos de entrega.

4. Inspecciona el pedido antes del envío y el momento de la carga. Antes de embarcar la mercancía debemos realizar una inspección final según el estándar AQL, adecuado a cada tipo de producto. Además nos conviene garantizar  que la carga y el sellado del contenedor se realizan correctamente.

5. Asume y controla el transporte. Cuidado con la logística, no la dejes en manos directamente del fabricante. Ellos saben fabricar y vender, pero desconocen las necesidades para que tu pedido no quede atascado en aduanas en el país de destino. Utilizar un experto en importación es una garantía.

Hay mucho más donde profundizar, si queréis ampliar información no dejéis de consultar nuestros servicios.